Aquel fin de semana de San Pedro 2010, muchos vinos fueron abiertos y probados, algunos ya han sido comentados aquí, otros lo serán en el futuro si es menester , pero por muchas razones decidí separar en el tiempo este vino de los demás, para incluirlo en el blog; creo que el hueco que dejó en mi vinoteca su marcha tardará en cubrirse, pero la espera mereció la pena, porque me tengo que cuadrar ante él.
El vino lo adquirí junto con el roble en la Vinoteca Assemblage en Burgos, y aunque mi deseo era haberlo guardado un poco más, ya he dicho en ocasiones que mi carne es débil y no me es fácil resistirme a según que encantos, cayendo cual Odiseo en brazos de Calipso. El vino procede de la bodega Hermanos Sastre en La Horra, y ha sido un descubrimiento.
El vino es un 100% tempranillo, con una crianza de 14 meses en barrica de roble francés y americano , los viñedos de los que se obtiene la uva son del cercano municipio de Roa de Duero; el vino tiene un color rojo picota, intenso de capa alta, sus aromas son densos fundiéndose la madera con la fruta madura, con la elegancia y la finura de un cuarteto de cuerda; cada vez que lo acercaba a nariz, nuevos misterios se abrían a su paso, tuestes, notas de vainilla, humo y regalices negros se muestran como sombras que juegan en tu mente; aun sin probarlo en boca, ya mi compañero y yo temblábamos, y beberlo sacó el lado más hedonista de este que os escribe, ya que como antes indique, cada copa hacia el vino aumentar en finura y clase, hasta elevarse como un elegido, graso, poderoso pero golpeando tu paladar con guante de seda, una autentica maravilla. Y su relación calidad precio……gloriosa…ya que no ronda los 15€.
Me ha costado casi una semana escribir de este vino; os diré que probamos este Viña Sastre junto al Neo 2006 en apenas 24 horas, y la batalla en mi mente que ambos vinos me generó termino no en tablas, sino en que ambos vinos son capaces de hacer que nos enganchemos una vez más a la Ribera del Duero.
R.
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