El Alma de los Vinos Unicos 2019


«Que al lugar donde has sido feliz 
no debieras tratar de volver»


Joaquin Sabina , Peces de Ciudad (2002)

Gracias. No se me ocurre mejor manera de comenzar esta entrada en la que espero plasmar mi experiencia del día 1 de abril en el Fórum de la Evolución Humana , dentro de la quinta edición del Alma de los Vinos Únicos. Gracias a Paco Berciano y Maribé Revilla, junto a todo el equipo de Alma Vinos Únicos, por seguir trayendo tamaño espectáculo a esta pequeña ciudad castellana. Seguro que sería más rentable hacerlo en Madrid, Barcelona o Bilbao, pero sucede en Burgos, cada dos años, y eso es gracias a vosotros. Gracias.

A medida que se acercaban las 11 de la mañana, la entrada del Fórum parecía la de un día grande de concierto. Docenas de acentos diferentes daban cuenta de este evento internacional. Una vez superado el control , subí a pata – me encanta ver las tripas del Fórum siempre que entro- hasta la planta donde se oía ya el bullicio de gente, copas y esa atmósfera de los grandes días. Copa en mano y plano en la mente, empezamos el recorrido por las estaciones, como si de un penitente se tratase, en ese luminoso día burgalés.

Mi primera parada fueron los vinos de Viñedos del Jorco , de la D.O. Cebreros, donde probé los vinos El Jorco, Las Cabañuelas y las Enebradas 2016, con un gran nivel, especialmente este último. Sin dejar la mesa dí cuenta de dos vinos de las Bodegas Mandragora , Vino de la Sierra de Salamanca, el Tragaldabas 2016 y El Molinillo 2016, este un vino que me encantó. De allí salté al Rodano, con los vinos de Domanie Alain Graillot , siendo el Alain Graillot Crozes-Hermitage La Guiraude una especial delicia. Tras cada mesa acudía a una pequeña esquina con sillas para intentar escribir sobre los vinos, lo cual ya dejé horas despues, limitandome a sacar fotos de los que mas me había impresionado.

Nunca falto a la cita con los vinos de Domaine Albert Morot, siendo el Albert Morot Beaune Aigrots 2008 el que mas me emocionó, con una linea general deliciosa. Parada especial en los vinos de Domaine de Pégau , desde su Laurence Féraud 2017 , delicioso, pasado por los Château Pégau Maclura 2016 ( brutal ) y Château Pégau Setier 2015, acabando con Domanie Pégau Châteauneuf du Pape 2016 , tremendo, puro hedonismo.

Quizás una de las bodegas mas exóticas era la Bodega Santa María la Nave , que elabora vinos en Silicia,  a las faldas del Etna, muy singulares tanto el blanco como el tinto. Una parada obligada.

Apuntado tenía probar los vinos de la Bodega Viñas Serranas, que desde la Sierra de Francia nos aportan otro interesante punto de vista sobre la rufete, elaborando muy buenos vinos de parcela, cada uno mas singular, siendo el Renvivas 2017 y La Pivonera 2017 los que mas me gustaron. Casi de rebote caí en la mesa de Domaine Reyane et Pascal Bouley , perdiendome entre los vinos Clos du bas des Teurons 2017 , el Volnay 1er Cru Champs 2017 o el Volnay 1er Cru Clos des Chênes .

Ya a esta altura, cada vez me era mas complicado ordenar mis pensamientos, abandonandome al placer hedonista, reflejado en el Domaine Anne & Herve Sigaut Chambolle Musigny 1er Cru Les Groselles 2017 del Domaine Anne et Hervé Sigaut. Pasé tambien por alguna bodega que no conocía y que me sorprendió gratamente, como Domaine le Rocher des Violettes , especialmente delicioso su Cabernet Franc . El Corton Charlemagne 2005 de Domaine Bonneau du Martray parecía que se agotaba y pude disfrutar de este vinaco maravilloso.

A este punto, mi letra parecía el encefalograma de un Walking Dead, y decidí reunir mis tropas y comer algo. Ninguna nota más fue añadida a la pesada libreta, solo fotos para no olvidar.

Arranqué mi tarde directamente con los vinos de Domaine des Baumard, desde sus blancos Clos de Saint Ives 2016 hasta sus lujuriosos dulces . Continue mi viaje por los Domaine A.Clape y sus Cornas del Rodano. Descalzo y genuflexo me planté ante el stand de Domaine Thibault Liger-Belair , disfrutando de Les Saint Georges y su Chambertin Grand Cru, de llorar. Brutales.

Desde mi primera exploración, apuntada tenía la bodega de la Provenza Clos Cibon , y maldita sea que mereció la pena, desde el blanco Chateau Cibon 2017 hasta los Clos Cibon Prestige Olivier Crú Classe, un gran descubrimiento. Sin solución de continuidad, dimos cuenta del Joseph Faiveley Chablis , y del fantástico Joseph Faiveley Grevey-Chabertin Vieilles Vignes que me enamoró. A estas alturas encontré a un viejo amigo, y a un nuevo amigo , con los que recorrí los stands de bodegas andaluzas y varios rieslings, de forma completamente hedonista entre risas y risas.

Mi viaje acabó con la megafonía lanzando el temido mensaje: son las 7 y se cierra el Forum .Muchos de los que quedábamos acudimos al stand de Paul Roger, donde nos esperaba un simpático anfitrión, con un botellón gigantesco de Paul Roger Cuvée Sir Winston Churchill. No exagero (tengo testigos) si digo que alrededor de 40 personas nos apretujábamos para que parte de esa botella icónica ,  cayese en nuestra copa, herida por lágrimas de vino tinto y blanco, dando final a una jornada inolvidable.

Siento si me alargué demasiado, pero esta entrada me recordó la razón fundamental por la que empecé el blog hace diez años, llevar nota de todos los vinos que me habían gustado, para que perdurasen en la borrosa memoria de este mortal. Además fue un hecho que la media de edad de los asistentes había bajado sensiblemente, y el número de aficionados alrededor de los 30 años era más que notable. Puede que estemos empezando a ver el cambio.

Gracias una vez más Paco y Maribe, porque este evento siga desarrollandose en Burgos. Ya quedan unos días menos para la sexta edición en 2021, que allí nos veamos todos.

R.


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