Misterio y Pasión, dos palabras que suelen ir siempre unidas, ya que el misterio , o viene del interés por lo oculto , o de la pasión, si la curiosidad es adecuadamente saciada y el morbo correspondido ; la pasión es ese ingrediente sin el cual, no merece la pena escribir, ni hablar, ni casi vivir en este agitado mundo, tan lleno de tonos grises en estos tiempos ; esa pasión, como los ojos de las musas, se muestra de muy distintas maneras, y una de las que compartimos ustedes y yo, es la pasión por el buen vino, no sólo como meros consumidores, sino intentando conocer los misterios que se esconden en cada copa.
Para un profano como yo en temas borgoñones (como diría mi amigo Jorge @sibaritastur, no me sacáis del tempranillo ), una cata de borgoñas desarrollada por Paco Berciano, cuya pasión por Borgoña no se puede ocultar al escucharle, es un auténtico acontecimiento, y mas cuando el lugar elegido es el Fórum de la Evolución, un lugar de encuentro ya habitual de los burgaleses y visitantes con la cultura, el arte y este año con la Gastronomía ; además para mi tenía el enorme interés de desvirtualizar a buenos amigos castellanos, como @taoplaton, con los que aún no había podido coincidir, un lujo breve, pero nuevas oportunidades habrá sin duda, así lo quieran los dioses.
La cata consistía en siete vinos, de los cuales dos serían blancos ; Paco Berciano nos introdujo en la historia del viñedo borgoñés, desde los Monasterios de Cluny y la Abadia de Citeaux , así como nos ayudó a entender los estragos que la revolución francesa causó en aquellas tierras , todo explicado con cuidados planos sobre el terreno borgoñón.

El primer vino que probamos fue el Mâcon-Verzé 2011 de Domaine Leflaive , uva chardonnay extraída de viñedos de la región de Maconnais , Puligny-Montrachet , en la Côte D’Or , y fermentado en barrica alrededor de doce meses ; color dorado pálido, buena intensidad en nariz, con algún fino recuerdo de la barrica, pero sobre todo buena expresión de la chardonnay, muy lejano a los blancos castellanos a los que ando acostumbrado, amplio en boca, alguna nota de fruto seco, avellana me comentó Fernando Mayoral de @terroaristas, y muy buena acidez, impactante vino, no estaba preparado para el, un blanco que sabía directamente a uva chardonnay 😉 , fantástico, he de decir que teníamos tres copas, pues la que me sirvieron de este vino, elaborado por Anne Claude Leflaive , fue la última que apuré ; el segundo de los blancos fue el Chablis Premier Cru La Fourchaume 2008 de Domaine Corinne et Jean Pierre Grossot , chardonnay de viñas plantadas entre 1988 y 1996 en la región de la Chapelle Vaupelteigne ; dorado brillante, con buena capa, floral y con recuerdos a fruto seco también, algo menos potente en nariz y boca que el anterior, notas herbáceas y una poderosa acidez que nos indica que quizás haya que esperarle aún mas tiempo , con un interesante regusto amargo final, no perdiendo ni un ápice de su elegancia.
- Chablis Premier Cru La Fourchaume 2008